Durante el camino, encontramos una mitad norte de España totalmente nevada, sin excepción, pero con carreteras en perfecto estado y sin nieve. Lástima por la gran cantidad de sal que había en el asfalto y por haber estado media hora a 80 km/h detrás de una quitanieves que repartía sal porque no se dejaba adelantar. El resultado fue que cuando cruzamos a Francia nuestro coche estaba totalmente blanco, cristales y matricula incluidos, lo que sin duda influiría en el pequeño incidente que tuvimos en tierras galas.
miércoles, 31 de enero de 2007
España blanca
Durante el camino, encontramos una mitad norte de España totalmente nevada, sin excepción, pero con carreteras en perfecto estado y sin nieve. Lástima por la gran cantidad de sal que había en el asfalto y por haber estado media hora a 80 km/h detrás de una quitanieves que repartía sal porque no se dejaba adelantar. El resultado fue que cuando cruzamos a Francia nuestro coche estaba totalmente blanco, cristales y matricula incluidos, lo que sin duda influiría en el pequeño incidente que tuvimos en tierras galas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario